El delito de contaminación acústica en bares

Los limitadores de sonido son dispositivos necesarios para poder evitar incurrir en un delito de contaminación por ruidos en bares, pubs…, ya que el Código Penal regula el mismo, incluyendo las conductas que consisten en ruidos que pueden provocar molestias e incluso daños en la salud.

Contaminación acústica

En primer lugar, es necesario saber que el mero hecho de producir ruidos no implica directamente que se esté incurriendo en un delito de contaminación acústica. Para ello, el nivel de ruido debe superar los límites establecidos, además de que la exposición a niveles intensos de ruido sea prolongada en el tiempo.

Los propios ayuntamientos y, en su caso, la normativa autonómica y estatal, son los encargados de la regulación de la actividad, con el objetivo de garantizar que los ciudadanos puedan convivir de la manera apropiada con el medio ambiente y sus vecinos. El ruido puede provocar graves problemas como alteraciones en etapas del sueño, insomnio, fatiga o depresión.

El exceso de ruido en locales como bares o discotecas pueden provocar grandes sanciones, las cuales varían en su importe en función de su gravedad. Por ello, el uso de limitadores de sonido se antoja imprescindible en todos ellos.

En España se producen numerosas sanciones en este sentido, siendo las comunidades más sancionadas las de Madrid, Cataluña, Andalucía, Valencia y Baleares. En función del caso, las multas pueden ir desde los 600 euros de las leves hasta los 300.000 euros que pueden llegar a alcanzar las más graves, las cuales podrían llevar asociado incluso penas de cárcel y multa.